Aquí, mansamente, pasaron los días de unos trajines, pero no talmente solo, sino con el recuerdo manso de una guitarra y un canto que estuvieron en estas tierras y ya no están y que he visto y oído mientas anduve entre tarcos y cerros.
Y así, mismo así: mansamente, muy parecido, se me va yendo por un tiempo don Carlos Di Fulvio.
6. Meditando
8. La tulumbana
10. Plenilunio
11. Vientre de cabra
12. El emprendado
13. Puñado de ají