sábado, octubre 26, 2013

Guitarra /3

Ahora, en esta madrugada norteña en la que estoy, veo cómo se va yendo el tiempo que me va a llevar al sur otra vez en unas horas.

Aquí, mansamente, pasaron los días de unos trajines, pero no talmente solo, sino con el recuerdo manso de una guitarra y un canto que estuvieron en estas tierras y ya no están y que he visto y oído mientas anduve entre tarcos y cerros.

Y así, mismo así: mansamente, muy parecido, se me va yendo por un tiempo don Carlos Di Fulvio.