A veces pasa: hay otro.
Uno cree que vio lo que vio y oyó lo que oyó. Y que allí termina el asunto, poco más o menos, y que eso es todo.
Pero hay otro.
Por ejemplo: si uno vio La strada, 8 y 1/2, Ensayo de orquesta, La dolce vita, Il Gatopardo, Giulietta de los espíritus, El padrino I y II, Muerte en el Nilo o Amarcord (por decir algo entre 1933 y 1979), seguro que oyó a Nino Rota. Y uno dice: Listo..., eso es todo.
Y resulta que hay otro. Que es el mismo.