Por razones bien distintas (tienen poco que ver una con la otra), las dos me gustan. Y creo que, de las originarias del variado mundo árabe, son las que más me gustan. Si no las únicas.
La legendaria y admirable libanesa Fairuz, cristiana, emblema de las cantantes árabes, que ya estuvo por aquí más de una vez.
Y esta joven argelina, Souad Massi, musulmana, que también es vecina de este barrio mediterráneo.
Algo las une: el francés del pasado de ambas naciones.
Dejo algo de lo último de Souad.