Búsquese un lindo pareán.
Lo van a tentar con una michelada, una Negra Modelo, una Indio oscura y fuerte. Éntrele, nomás. Pero, hágame caso: la cerveza no es para siempre.
Hay que llegar a un tequilita.
No. No lo mezcle. Tiene que ser puro. Y en lo posible, muy bueno. Pero con bueno alcanza.
Está la botana, pero eso no sé si dura.
Lo que sí, puede entrarle a unos taquitos, de lo que quiera: de res, de chorizo, de puerco, de cabeza, de lengua... Complete con una que otra quesadilla, hágame caso. Bastante limón, algo de jitomate verde, cebollita morada, buen cilantro. Un toque de guacamole, unos tototopos con panelita, y chilitos varios: de ábol, poblano, pasillo, piquín. ¿Habanero? Hmmm..., qué puedo decirle...
Mire que puede ser una birria también. Y, si se le antojan, unos frijolitos, para acompañar. O un pozole. Vea usted.
Tortillitas de maíz, siempre, claro.
Y así.
Unas dos o tres horitas.
Se lo pasa bien a gusto, créame.
_______________
La mayoría de estas piezas la hace el Mariachi Vargas de Tecalitlán, con algunas incursiones del Mariachi Monumental Sebastián Vargas. Digo, nomás, para que sepa de qué va.