Hace una punta de años, menté un hallazgo de Jaime Dávalos, unos poemas dichos y cantados que encontré en plena calle. Lo acompañaba Eduardo Falú esa vez. Dejé allí unos versos de Dávalos, sin la voz y el canto.
Ahora vine a dar con casi lo mismo, pero de Dávalos solo. Y diciendo y cantando esta vez.