2. La norteña
5. Permiso
11. Cautiva del río
Viera cómo se despertó el recuerdo de Cafrune, nomás mentarlo. Lo que puede un nombre, viera...
Por ejemplo, el bueno de Juan Ignacio que, compartiendo la preferencia paterna y propia, se acordó de Voy andando, una de las poquísimas composiciones de Cafrune, con una dicción casi, sólo casi, irreconocible.
Por eso. No habrá dos sin tres.